El Convenio Colectivo de Trabajo para el personal del Sistema Público de Salud obtuvo dos despachos en minoría en el plenario de las comisiones de Legislación del Trabajo y Asuntos Laborales (I), Asuntos Constitucionales y Justicia (A), Hacienda y Presupuesto (B) y Desarrollo Humano y Social (C) que se realizó hoy en la Legislatura. Uno de los despachos plantea la aprobación del Capítulo III del CCT homologado por la Subsecretaría de Trabajo mediante Resolución 06/18 que reunió 26 votos aportados por el MPN (a excepción del diputado Claudio Domínguez), FRIN, UP-UNA y Adelante Neuquén. En tanto, el segundo despacho propone avalar el CCT pero no aprobar cuatro artículos referidos a trabajo incentivado y trabajo eventual (Nº 25, 33, 96 y 123). Este dictamen cosechó 18 votos emitidos por el diputado Domínguez (MPN) y los bloques FN, FpV, Libres del Sur y Frente Grande. Para la votación se tomó en cuenta el criterio de voto ponderado, en función de la cantidad de comisiones a la que pertenece cada diputado y diputada. El interbloque Cambiemos y PTS-FIT no avalaron ninguno de los dos despachos.
Durante la jornada, que se extendió por 10 horas, expusieron el ministro de Salud, Ricardo Corradi Diez y referentes del Sindicato de Profesionales de Salud Pública de Neuquén (Siprosapune), ATE, UPCN y el Sindicato de Enfermería.
El debate giró en torno a la facultad de la Legislatura para modificar o no el CCT. Uno de los puntos objetados fue la posibilidad de que el trabajo incentivado transgreda el artículo 38 inciso h de la Constitución Provincial que lo prohíbe. Al respecto, el diputado Eduardo Fuentes (FN) se pronunció a favor de llevar adelante el CCT “sin esos cuatro artículos que son inconstitucionales” y dijo que “se trata de honrar los derechos que han conquistado los trabajadores” pero pidió no estimular la flexibilización que genera la desvalorización de la dedicación exclusiva y el rendimiento óptimo. La diputada Nanci Parrilli (FpV) dijo que “no dañamos a nadie sino que salvaguardamos el sistema público de salud”. Jesús Escobar (Libres del Sur) opinó que “el patrón actuó de mala fe no convocando a todas las partes” y consideró que el Convenio “es horrible para el sistema público de salud”.
En tanto, el diputado Mario Pilatti (MPN) dijo que una modificación del CCT “sentaría un precedente que condenaría a que no hayan más convenios colectivos de trabajo” y defendió la constitucionalidad del rendimiento óptimo. Su compañero de bloque, Maximiliano Caparroz señaló que la reglamentación del Poder Ejecutivo “va a subsanar el 90% de las controversias técnicas que generó el CCT” y consideró que el rendimiento óptimo “es una herramienta más que no modifica el sistema de salud neuquino, al igual que las guardias escalonadas”.
Durante la mañana, el secretario general de Siprosapune, César Dell’Alli, rechazó el CCT y dijo que el sector no fue incluido en la discusión. Aseguró que el Convenio produce un achatamiento de la pirámide salarial, al tiempo que favorece el éxodo de profesionales del sistema público al privado. En ese sentido, explicó que incorpora adicionales según la cantidad de guardias, sólo para los médicos, y advirtió una desvalorización de la dedicación exclusiva, por la inclusión de la modalidad de “rendimiento optimo” que funcionará de manera optativa. Afirmó que el CCT cambia el paradigma del sistema de salud y potencia la idea “médico céntrica” de la salud. Cuestionó la figura de “rendimiento óptimo” que “pretende compartir recursos entre el público y el privado” y acotó que el Convenio “prioriza cantidad sobre calidad”.
La secretaria gremial, Noemi Alemany, manifestó que el Convenio “viene a transgredir, violar y modificar groseramente una política de salud de 40 años en esta provincia”. En tanto, Roberto D’Angelo aseguró que si el Convenio se aprueba tal como está “es el principio del fin” del sistema público de Salud y solicitó a los diputados y diputadas que la Legislatura brinde un marco legal al poder Ejecutivo para que lo reabra. También señaló que la dedicación exclusiva “no es un régimen residual sino medular” e informó que el 85% de los profesionales de salud tiene ese tipo de dedicación.
A su turno, el ministro de Salud, Ricardo Corradi Diez, habló de la existencia de “anticipadores de desgracias” y de “consideraciones malintencionadas”. Aseguró que el Convenio no vulnera ningún derecho y explicó que la intención no es que se hagan más guardias, sino reconocer el trabajo de quienes las realizan. También subrayó que el “rendimiento óptimo” permitirá llevar profesionales de distintas especialidades médicas a lugares donde es difícil que se radiquen.
“Esto no es sectorial ni es de clases, es de un sistema”, aseveró tras enfatizar en reiteradas oportunidades que se trata de una herramienta que “no tiene mala fe ni mala intención”. También aclaró que el Convenio contempla medidas “que se hicieron para mejorar” y pensadas en “servicios puntuales y basado en las necesidades de las localidades”. Asimismo, no descartó que se puedan incorporar o modificar aspectos del articulado en la reglamentación del Convenio.
Por ATE, el secretario general Carlos Quintriqueo aseguró que el Convenio ya se encuentra en vigencia porque fue homologado por la Subsecretaría de Trabajo, pero necesita del aval legislativo para efectivizar las remuneraciones modificadas a los distintos trabajadores del sector. En tanto, el secretario adjunto Jorge Marillán desmintió que la totalidad de los profesionales objeten el acuerdo y que el beneficio es para todos los trabajadores porque “implica una mejora salarial, mejores condiciones de trabajo y que las decisiones ya no las toma solamente la patronal” sino en conjunto con los empleados en el marco del convenio paritario. Los gremialistas aseguraron que el Convenio se asemeja a los 14 ya aprobados de distintas reparticiones públicos y entre los principales beneficios mencionaron que implica el pase a planta permanente de 400 trabajadores y un incremento salarial que va de un 15% a un 44%, lo que representa 700 millones de pesos. “Hay una intencionalidad de discutir lo que está por fuera del Convenio”, aseguró Quintriqueo.
Desde UPCN, Marcelo López defendió el acuerdo en tanto “beneficia a todos los trabajadores de salud”, Mientras Mariluz Majul remarcó que permite hacer carrera sanitaria.
A su turno, el secretario general del Sindicato de Enfermería, Darío Mas, aseguró que el gremio no está en contra de la idea de Convenio Colectivo pero expresó su desacuerdo con la forma en que se llevó a cabo. A la vez, pidió participación en la reglamentación para debatir aspectos específicos.
El plenario fue transmitido en vivo a través de la página web de la Legislatura. Estuvieron presentes los diputados y diputadas Mario Pilatti, Sergio Gallia, Damián Canuto, Encarnación Lozano, María Laura du Plessis, Carlos Koopmann, Santiago Nogueira, Juan Monteiro, Ramón Soto, Francisco Rols, Claudio Domínguez, Pamela Mucci, Carolina Rambeaud, Ayelén Gutiérrez, Mariano Mansilla, Ayelén Quiroga, Maximiliano Caparroz, Gloria Sifuentes, Alejandro Vidal, Lucía Menquínez, Eduardo Fuentes, Raúl Godoy, Guillermo Carnaghi, Oscar Smoljan, Raúl Podestá, Carlos Sánchez, Nanci Parrilli, Jesús Escobar y Luis Sapag.
