El municipio llevó a cabo un importante operativo de limpieza del río Limay en una actividad que se realizó de manera conjunta con el Centro de Actividad Subacuática del Limay (CASAL). La subsecretaria de Medio Ambiente, Silvia Gutiérrez, señaló que se trató de una primera etapa que “abarcó desde la entrada al Río Grande hasta la desembocadura del arroyo Durán, pasando por el brazo de los clubes” y dijo que se sacó gran cantidad de vidrios, botellas, cartones y bolsas, entre otros elementos.
“Encontramos muchas botellas que al estar hace un tiempo allí se llenan de tierra y entonces se alojan en el fondo y cuesta más removerla. También se retiró mucho vidrio que es un riesgo para los bañistas, además de ser un material que no debería estar ahí, así como también alambres y cajas, entre otros”, detalló la funcionaria sobre la jornada realizada durante la mañana del domingo en conjunto la escuela de buceo CASAL, Prefectura, Defensa Civil municipal y la subsecretaría de Limpieza Urbana del municipio.
En ese sentido, adelantó que en las siguientes instancias se trabajará río arriba del Limay, es decir, en Gatica y Balsa Las Perlas, en principio. “Por indicación del intendente Quiroga estamos llevando adelante estos trabajos pero sabemos que también tiene que haber un compromiso de todos los ciudadanos para evitar seguir encontrándonos con estas cosas que no deberían estar en el río, tanto por una cuestión de seguridad como de cuidado del medio ambiente”, expresó.
Los residuos removidos fueron luego trasladados por camiones de la subsecretaría de Limpieza Urbana al centro de transferencia municipal ubicado en José Rosa y Riccheri.
Por su parte, el presidente del Club CASAL, Miguel Crljenko, explicó que se trabajó con 25 integrantes de la Escuela. “Nuestra actividad está toda basada en el agua así que nos sumamos a esta propuesta con toda la predisponibilidad para este tipo de eventos porque en los buceos vemos que hay ciertos elementos que no corresponden que estén en el río”.
“La idea es tratar de mantener nuestros cauces limpios”, enfatizó al tiempo que detalló que las tareas consistieron en “la limpieza de 20 metros de costa fundamentalmente porque por experiencia sabemos que es allí donde se encuentra la mayor cantidad de elementos ajenos al río como vidrios, bolsas y cajas”.
Se hizo un barrido ida y vuelta desde Avenida Olascoaga y Río Grande hasta los clubes y luego por el cauce principal por los espigones, tarea que demandó poco más de 3 horas y la utilización de equipos básicos de neoprene y de embarcaciones de Defensa Civil y de Prefectura. “Hicimos mucha apnea, anduvimos por arriba más que nada, porque la profundidad del río no es mucha, quizás 3 o 4 metros, pero siempre teniendo en cuenta las cuestiones de seguridad como pozones y remolinos”, puntualizó Crljenko.
